22 de noviembre de 2024 - 14:23 Álvaro Galiana, director del Hospital Pereira Rossell, manifestó su preocupación por la cantidad de niños que ingresan al centro con heridas de bala, luego de que el jueves una pequeña de nueve años fuera alcanzada por un proyectil en Piedras Blancas.
“No sé si este año ha habido más casos que en años anteriores”, explicó el médico, que aclaró que los trabajos de investigación en el hospital “no encaran el tema de la misma manera que lo encara la Policía u otras personas que opinen sobre el tema. Es un tema médico”.
Sí apuntó que se viene observando “un aumento en las heridas de bala en estos últimos 15, 20 años, y este año creo que cada vez que ha habido un niño con herida de bala ha sido muy difundido y mediatizado. Es un problema que tenemos y que hay que asumir”.
Galiana señaló que un menor herido debe ser atendido en todos los aspectos, tanto físicos como psicológicos, dado lo traumático de la situación.
“El aspecto de un niño baleado es una situación de una violencia extrema que asusta mucho”, dijo. “Una cosa es esta niña, que aparentemente recibió una bala perdida por una situación que no tiene nada que ver, y otra cosa son adolescentes que forman parte de ese grupo que participa activamente en esas balaceras”.