Sobre las 5:00 de la mañana del 1° de marzo, un ómnibus de Núñez volcó a la altura del kilómetro 227 de ruta 8 en Lavalleja cuando se dirigía a Melo.
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SUSCRIBITELa información se desprende de datos presentados por el abogado Rafael Silva, defensor de diez de los pasajeros.
Sobre las 5:00 de la mañana del 1° de marzo, un ómnibus de Núñez volcó a la altura del kilómetro 227 de ruta 8 en Lavalleja cuando se dirigía a Melo.
El trágico incidente derivó en cuatro muertes, 30 pasajeros heridos, 19 ilesos y un juicio que aún está en curso.
El abogado Rafael Silva, que representa a algunos de los damnificados, pidió un informe sobre cómo habían sido las jornadas previas del vuelco del conductor.
Según se desprende de esa información, el hombre solo tuvo un día de descanso del 19 de febrero hasta el día del siniestro. También tuvo un total de ocho días de corrido entre viajes, que se caracterizaban por ser interdepartamentales y demandar, por lo general, varias horas en las rutas. No tenía ningún viaje que fuera menor a los 250 kilómetros.
El día anterior al accidente, el chofer había comenzado su jornada a las 08:00 con un viaje de Montevideo a Aguas Dulces, que toma cuatro horas y media. Según consignó El Observador, tras un descanso de seis horas en una casa alquilada por la empresa, el conductor hizo el viaje de vuelta a la capital de 18:00 a 23:00. Tras esto, sobre la 01:00 de la madrugada inició el viaje hacia Melo que terminó con el vuelco del coche.
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