9 de junio de 2025 - 18:58 El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó el envío de 2.000 efectivos de la Guardia Nacional a Los Ángeles, en respuesta a los disturbios registrados en esa ciudad durante las últimas jornadas de protesta contra las redadas migratorias impulsadas por el gobierno federal.
La medida fue acompañada por una declaración contundente del mandatario: “Si escupen, nosotros golpearemos”, en una clara muestra de su intención de reforzar el control federal ante las manifestaciones. Trump, de 78 años, apeló a su rol de “comandante en jefe” para justificar el despliegue de reservistas en territorio californiano, en medio de críticas de organizaciones de derechos civiles y líderes demócratas.
Desde hace tres días, varias zonas de Los Ángeles han sido escenario de enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad, en el marco de movilizaciones contra la política migratoria del gobierno. La intervención militar fue calificada como “una escalada innecesaria y un abuso de poder” por Hina Shamsi, representante de la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU, por su sigla en inglés).
El gobierno federal no descarta ampliar el uso de fuerzas militares en otras ciudades del país si persisten las protestas. Trump ha insinuado que podría considerar un despliegue más amplio de tropas si continúa la oposición a las deportaciones de migrantes en situación irregular.
El asesor presidencial Stephen Miller escribió en la red social X que "la migración masiva deshace sociedades" y calificó a Los Ángeles como “la prueba” de los efectos negativos de la inmigración. También apuntó contra el estado de California, al que describió como “un paraíso perdido”.
El próximo sábado se realizará en Washington un desfile militar por el 250 aniversario de la creación de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, fecha que coincidirá con el cumpleaños número 79 del mandatario.
Expertos legales han advertido sobre las implicancias del uso del ejército en tareas de orden interno. William Banks, profesor de Derecho en la Universidad de Siracusa, señaló que para utilizar militares en activo sería necesario invocar la Ley sobre la Insurrección, algo que ha ocurrido en contadas ocasiones en la historia del país. “Si declara el estado de insurrección, sus poderes serán casi ilimitados”, advirtió.
California, bastión del Partido Demócrata, se mantiene como foco de conflicto entre el gobierno federal y autoridades locales. En su plataforma Truth Social, Trump criticó duramente a la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, y al gobernador del estado, Gavin Newsom, a quienes acusó de no poder restablecer el orden. Además, amenazó con emprender acciones legales contra congresistas que bloqueen las expulsiones.
La situación continúa generando tensión entre el Ejecutivo, el Congreso y el Poder Judicial, en un contexto donde el uso del poder presidencial vuelve a estar bajo escrutinio.
AFP