22 de diciembre de 2025 - 07:57
Estados Unidos inició el domingo la persecución en aguas del Caribe de un petrolero presuntamente sancionado, en un nuevo episodio del endurecimiento contra el transporte de crudo vinculado a Venezuela.
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SUSCRIBITEEstados Unidos persigue a un petrolero en el Caribe en medio del endurecimiento contra el crudo venezolano
Se inició una “persecución activa” de un buque presuntamente sancionado, mientras EE.UU refuerza el control sobre tanqueros vinculados a Venezuela.
Crece la tensión entre Estados Unidos y el gobierno venezolano.
AFPLa “persecución activa” está a cargo de la Guardia Costera y se produjo un día después de que esa misma fuerza incautara un segundo buque sospechoso de transportar petróleo venezolano sujeto a sanciones. Según un funcionario, que habló bajo condición de anonimato, el navío perseguido “iza una bandera falsa” y es objeto de una orden de incautación judicial por participar en la evasión ilegal de sanciones.
Una operación sostenida
El presidente Donald Trump había anunciado el 16 de diciembre un bloqueo de “buques petroleros sancionados” que navegan hacia y desde las costas venezolanas, exigiendo la devolución de activos estadounidenses que, según EE.UU, fueron robados por el país sudamericano.
En ese contexto, Estados Unidos desplegó en el Caribe una flota de naves de guerra que, de acuerdo con su versión oficial, integra una operación contra el narcotráfico. El gobierno de Nicolás Maduro sostiene, en cambio, que se trata de una estrategia de presión para forzar su salida del poder.
El buque en cuestión
Medios estadounidenses identificaron al buque perseguido como el petrolero Bella 1, sancionado por Estados Unidos desde 2024 por sus vínculos con Irán y con el grupo proiraní libanés Hezbolá. De acuerdo con el sitio especializado TankerTrackers, el navío se dirigía hacia Venezuela y no transportaba carga. Según informó The New York Times, fuerzas estadounidenses intentaron interceptarlo durante la noche del sábado, sin éxito.
Las acciones se producen mientras Trump acusa a Venezuela de utilizar su principal recurso, el petróleo, para financiar actividades criminales como el narcotráfico y la trata de personas. Entre los cargueros retenidos figura el Centuries, interceptado el sábado, una operación que Caracas calificó de “robo y secuestro”.
La portavoz de la Casa Blanca, Anna Kelly, aseguró en la red social X que el buque transportaba petróleo de PDVSA y que operaba bajo “bandera falsa” como parte de una “flota fantasma” para financiar al “régimen narcoterrorista de Maduro”.
En paralelo, la vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez confirmó que un petrolero de la empresa estadounidense Chevron zarpó desde Caracas hacia Estados Unidos con crudo venezolano, en el marco de una licencia vigente. Chevron representa alrededor del 10% de la producción petrolera del país.
Rodríguez afirmó que la operación se realizó “en estricto cumplimiento de la normativa”, mientras Caracas volvió a negar cualquier vínculo con el narcotráfico y acusó a Estados Unidos de intentar apropiarse de sus reservas petroleras.
Con información de AFP.
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