4 de noviembre de 2024 - 07:55 Quincy Jones murió a los 91 años, tras una intensa carrera que lo convirtió en historia de la música. Fue productor de Michael Jackson y Frank Sinatra, trompetista y compañero de Ray Charles y uno de los genios tras éxitos inolvidables como "Thriller" y "We Are the World".
Jones falleció el domingo en su casa de Los Ángeles, rodeado de su familia. Extrovertido y sociable, personificó una parte de la historia de la música: director musical de Dizzy Gillespie, arreglista de Ella Fitzgerald y encabezó la última gran actuación de Miles Davis, que se transformó en el álbum "En vivo de Miles & Quincy en Montreux".
Este hijo de Chicago produjo desde a Aretha Franklin hasta a Celine Dion, y desató un terremoto cultural al lanzar la carrera solitaria del joven Michael Jackson, un matrimonio musical que produjo "Thriller" y cambió el pop para siempre.
Luego de mudarse a Seattle con su hermano, Quincy descubrió su habilidad con el piano en un centro recreativo, y la historia de amor empezó. "Encontré otra madre", escribió en su autobiografía de 2001.
Jones comenzó tocando en pequeños locales. Escribió su primera composición y desarrolló habilidades para los arreglos musicales y la trompeta.
"Thriller"
Jones trabajó también en Hollywood, en shows de televisión y películas. Escribió sus propios éxitos, como "Soul Bossa Nova", mientras realizaba arreglos a un ritmo vertiginoso para decenas de estrellas de la industria musical.
Trabajó con Sinatra, arreglando la más famosa versión de "Fly Me To The Moon", y forjó una relación personal y musical con el cantante hasta su muerte.
Jones fundó un sello discográfico, una revista de hip-hop y produjo el famoso programa de televisión "El Príncipe de Bel-Air", que hizo saltar a la fama a Will Smith.
Llevó a Oprah Winfrey a la pantalla grande al presentársela a Steven Spielberg, quien la reclutó para actuar en la película "El Color Púrpura", por la que fue nominada al Óscar.
Apoyó a Martin Luther King Jr y a causas humanitarias en África. Reunió a decenas de estrellas del pop para cantar el clásico "We Are the World", para recolectar fondos contra la hambruna en Etiopía en 1985.
Con información de AFP.