Martín Lema sostuvo que el sindicato del Mides "le torció la mano al Gobierno" y realizó un pedido de informes

La reducción horaria, dijo, “es una pésima señal, porque en tiempos en que habría que fortalecer la atención no es lógico una reducción de la carga horaria de los funcionarios que fueron regularizados en la última etapa”.

Lema condenó que se haga “una reducción de ocho a seis horas, manteniendo el salario por ocho horas. Es muy injusto. Pensemos en quienes están buscando trabajo, sin éxito, o quienes tienen que llevar adelante una tarea laboral de acuerdo a como marca la normativa, que en este caso haya una excepción, en estos momentos y en funciones como las que desarrolla el Ministerio de Desarrollo Social”.

Para el senador blanco, “no es una buena señal que el sindicato le haya torcido la mano a las actuales autoridades”.

Por ese motivo, Lema realizó un pedido de informes, para conocer cómo se compensarán las horas que no se trabajarán y que, sin embargo, los trabajadores van a cobrar.