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SUSCRIBITEEl organismo analizó la compra y venta de bienes por parte de los indagados, su entorno, domicilios y sociedades vinculadas entre 2018 y mayo de 2025.
Investigación por Conexión Ganadera.
FocoUyLa causa por Conexión Ganadera, que durante años captó inversiones bajo la promesa de altos retornos en el negocio ganadero, tuvo un giro clave: la Secretaría Antilavado (Senaclaft), tras un análisis preliminar, concluyó que existen elementos suficientes para justificar una investigación formal por presunto lavado de activos, según informó El Observador.
El colapso de la empresa dejó un vacío de cientos de millones de dólares y a miles de inversores sin respaldo real en ganado, lo que desencadenó una de las mayores estafas financieras de la historia uruguaya.
El organismo analizó la compra y venta de bienes por parte de los indagados, su entorno, domicilios y sociedades vinculadas entre 2018 y mayo de 2025.
La Secretaría identificó nuevas propiedades, incluyendo una estancia en Río Negro, campos en Rocha y apartamentos, adquiridas cuando la empresa ya estaba en dificultades financieras, lo que refuerza la hipótesis de movimientos sospechosos de capital.
Pero no son las únicas dos empresas que utilizaban los dueños de conexión ganadera en este entramado económico. Basso usaba también una unipersonal en la que empleó a su yerno hasta noviembre de 2024. Luego de su fallecimiento, sus sucesores inscribieron la empresa ante la DGI bajo el nombre sucesores de Basso Pallares y las titulares son Agustina y Candelaria Basso, inscripta bajo remates ganaderos, consignatarios y comisionistas de ganado.
La Senaclaft concluyó que estos hallazgos “justifican investigar lavado de activos”, abriendo la puerta a una investigación más profunda sobre el origen y destino de los fondos manejados por la empresa y sus directivos.
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