Olena Kurilo, una educadora y directora de escuela, se convirtió en el rostro de la guerra en Ucrania tras la invasión de Rusia y dio su testimonio.
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SUSCRIBITEOlena Kurilo, una educadora y directora de escuela, se convirtió en el rostro de la guerra en Ucrania tras la invasión de Rusia y dio su testimonio.
El horror del conflicto armado tras la invasión rusa en suelo ucraniano dejó a Olena Kurilo como protagonista, una educadora y directora de escuela que salvó su vida de milagro tras los bombardeos en la ciudad de Kharkiv.
Retratada por la agencia francesa AFP, Kurilo manifestó que aún se repone del golpe anímico que supone vivir en un país en guerra, con decenas de sus vecinos heridos y muchos de ellos muertos tras las explosiones.
"Dios mío, no estoy lista para morir. Estaba en shock, no sentí ningún dolor", agregó.
Los misiles dejaron un cráter de unos cinco metros en Kharkiv, obligando a los Bomberos a multiplicar esfuerzos para atender a las víctimas atrapadas en inmuebles y vehículos.
"Soy muy afortunada. Debo tener un ángel guardián muy fuerte para haberme mantenido con vida", reconoció emocionada.
"Haré todo por Ucrania, tanto como pueda, con toda la energía que tenga. Nunca, bajo ninguna condición, me someteré a Putin. Es mejor morir", sentenció.
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