El auge inmobiliario que se vive en la capital pero también en otras ciudades del país tiene un impacto en los precios, el empleo y la mano de obra en la construcción.
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SUSCRIBITEA raíz de la ley de vivienda promovida, Montevideo “crece hacia arriba”, pero ese no es el único factor. ¿Cómo impacta este fenómeno en la vida cotidiana de los ciudadanos?
El auge inmobiliario que se vive en la capital pero también en otras ciudades del país tiene un impacto en los precios, el empleo y la mano de obra en la construcción.
Montevideo crece hacia arriba, es una realidad, y en su mayoría gracias a proyectos impulsados en políticas de vivienda promovida. Alejandro Ruibal, presidente de la Cámara de la Construcción, destaca el “buen nivel de actividad” “en ese marco.
Nelson Alonso, de la Asociación de Agentes Inmobiliarios, dice, en este informe de Telenoche, que “la ley de vivienda promovida ha incentivado muchísimo la construcción y la oferta”.
Ignacio Scelza, de Infocasas, subraya que buena parte de la inversión es extranjera, y Alonso enfatiza que las nuevas construcciones vienen de la mano de “cambios culturales importantes”, dado que se levantan edificios para la tercera edad, para profesionales, para estudiantes, que brindan servicios colaterales.
Matías Medina, representante de la Cámara Inmobiliaria Uruguaya, coincide en que los consumidores buscan, ahora, “barbacoa, jardín, juegos infantiles y algún espacio de esparcimiento, como un gimnasio”. Medina asegura que “las costumbres fueron cambiando y eso fue recibido por los desarrolladores para construir a medida de un consumidor final que es quien va a habitar allí”.
La mayoría de los compradores piensa en una futura renta y que los apartamentos tengan uno, o como máximo dos dormitorios, en relación a la actualidad demográfica, una vez pasado “el furor del monoambiente”.
Pero este auge de la construcción está relacionado con los precios, y así los alquileres están basados en el valor del metro cuadrado construido en cada zona. De esta forma, los barrios más caros de la capital son Carrasco, un sector del puertito del Buceo, la zona del Golf en Punta Carretas y, del otro lado, La Teja, Manga, Maroñas, Lezica, Peñarol.
Esto es “proporcional a la inseguridad y la infraestructura de la zona”, destaca Medina.
Cordón es la zona más buscada para alquilar, ya que tiene valores medios de arrendamiento y buena incidencia de servicios y seguridad.
Pero, ¿cuánto cuesta alquilar en Montevideo? Alonso señala que un arrendamiento está entre los $20.000 y los $30.000, dependiendo de la característica de la propiedad.
“Al uruguayo le cuesta muchísimo tener casa propia”, dicen los ciudadanos de a pie, que también apuntan que los precios de los alquileres son elevados.
Alonso reconoce que “los arrendamientos están un poco altos”, y Medina coincide, pero indica que hay que “tener en cuenta que se regula por oferta y demanda”.
En los últimos años, los alquileres aumentaron en el entorno del 6% al 8%, pero hay lugares en los que los precios se dispararon, como Ciudad de la Costa, donde “hay poca oferta y mucha demanda”, los precios subieron un 12%. Esto se explica porque, a partir de la pandemia, la demanda de compra y alquiler creció de manera importante hacia la Costa de Oro de Canelones.
Pero ante esta realidad, los promotores llaman a prestar atención ante el aumento de las maniobras de estafa, e instan a realizar las operaciones con actores reconocidos. En 2020 se denunciaron unas 400 maniobras fraudulentas, y el año pasado llegaron a las 5.000 denuncias anuales, subraya Alonso.
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