Prisión preventiva para tres personas por crimen de Edwar Vaz

Para la fiscal del caso, Andrea Naupp, la pareja de la mujer fue quien planificó y contrató a los sicarios para asesinar a Vaz. A la amiga de la expareja de Vaz, en tanto, se la acusa de un delito de homicidio especialmente agravado en calidad de cómplice. Al joven que llevó a los sicarios a Maldonado, además, se lo acusa de cómplice de homicidio.

El hombre que actuó como chofer y los trasladó desde Playa Mansa hasta la casa del profesor ya está en prisión, al igual que la ex pareja de Vaz.

Además, un hombre que se encontraba detenido por ser el dueño del auto en el que viajaron los sicarios, quedó en libertad en calidad de emplazado.

CRIMEN.  Edwar Vaz fue asesinado en la puerta del edificio donde residía luego de responder al timbre. Los dos sujetos que se encontraban del otro lado le aseguraron que su hija había tenido un problema. Sin embargo, cuando respondió al llamado recibió varios impactos de bala.

Los sicarios llegaron un auto reconocido por el hijo de la víctima. Según dijo ante las autoridades policiales, era un vehículo que trabajaba en la mansión “Gipsy Queen”, propiedad de su madre.

La investigación policial dejó al descubierto que el conductor del coche, era un hombre de 25 años que realizó tareas de mantenimiento en el lujoso chalet. Luego de ser interrogado, el hombre admitió ser quien trasladó, esperó y luego se llevó del lugar a los dos sicarios autores materiales del hecho y finalmente se le dispuso la prisión preventiva este sábado.

Según se desprende del dictamen de la fiscal, el pedido de que la ayudara a llevar a los sicarios ocurrió un día antes, el domingo 8 de julio.

La mujer le dio indicaciones de que tenía que recogerlos en la rambla y describió como estarían vestidos los autores del asesinado. “A la vuelta”, después de ir a la casa de su expareja, debía dejarlos donde los había levantado.

El hombre no pidió detalles ya que “la imputada suele ser estricta” y accedió porque “le teme”, dice el dictamen. Así, cumplió en forma estricta lo que le pidió.

La exmujer es integrante de una familia gitana de gran poderío económico y tiene dos hijos con Vaz. Ambos estaban divorciados desde 2016 por diferencias en la relación y el fallecido preparaba una demanda contra ella por al menos US$ 1.500.000.