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Entrevista

Nicolás Martinelli espera que en el próximo Gobierno se entre a "una etapa de madurez política"

“La gente llegó a un nivel de hartazgo de que los políticos no nos pongamos de acuerdo” y quiere acuerdos en políticas de Estado.

En materia de delitos, dijo, “estamos mejor que cuando arrancamos, pero conformes no. Me hubiera gustado profundizar la baja” de los homicidios, señaló. En ese sentido, señaló que el actual Gobierno “encontró un rumbo” basado “en el enfoque dual” que llevó a esta gestión a “una senda de cinco años de bajas consecutivas de todos los delitos, salvo el de los homicidios”.

No obstante, sostuvo que, pese a esos guarismos, se está por debajo de los niveles de 2019. “Llegamos a una meseta y hay que profundizar para lograr la baja”.

Martinelli fue consultado sobre la percepción y la realidad de la inseguridad, pero descartó que esta haya sido la causa por la que el actual Gobierno perdió las elecciones. “Los uruguayos reconocen que hay más patrullaje, más tecnología que en el período anterior”, pero la derrota electoral es “multicausal”.

El ministro coincidió con el futuro titular de la cartera, Carlos Negro, que señaló que las cifras de homicidios son muy altas. Martinelli apuntó que el promedio en Uruguay siempre ha sido de entre 6% y 8%, en 2012 comenzó a crecer y alcanzó su pico en 2018, cuando llegó a 12 homicidios cada 100.000 habitantes. Ante esas cifras, dijo, “es más difícil frenarlos y bajarlos”.

“El trabajo que nos tocó fue muy difícil, tuvimos que frenar una senda creciente de delitos, especialmente de homicidios, que crecieron 120% en los últimos gobiernos del Frente Amplio”, apuntó. “El gran desafío del próximo Gobierno será lograr bajas más pronunciadas”.

Martinelli añadió que, para eso, es preciso acordar “políticas de Estado en materia de seguridad pública, y sin importar el que gane, que el que venga tenga la madurez de continuar programas y proyectos bien evaluados”.

Además, apuntó que no se pueden obtener resultados a corto plazo, a no ser que se empleen soluciones como “el método Bukele”, pero que “Uruguay no aceptaría”. “No estamos preparados para ceder libertades a costa de eso”, subrayó.

Martinelli señaló que no sabe hasta dónde penetró el narcotráfico en Uruguay, pero destacó que el país tiene una red de contención pública y a nivel de los barrios que le dificulta esa tarea.

“Uruguay tiene un músculo muy importante de contención social” con el Mides, el MSP y la escuela pública. “Esa es la ventaja para convertir esos lugares de violencia en zonas de paz, pero eso lleva tiempo”.

El ministro explicó que hay varios programas en práctica, como “Barrios sin Violencia”, que ya lleva seis meses de implementado y ha evitado problemas, o el proyecto PIA. Para ello pidió que la próxima Rendición de Cuentas le brinde más recursos al Ministerio del Interior.

Además, insistió en generar políticas de Estado que hasta el momento no se consiguieron. “Durante mucho tiempo se habló de falta de madurez política, de cierta mezquindad”, y que “eso pasó hace dos años, cuando se convocó al acuerdo multipartidario”. Allí, dijo, “se presentaron más de 80 propuestas, quedaron 16 medidas, siete de ellas presentadas por el Frente Amplio, que finalmente decidió no apoyar”, y luego incluyó esas siente propuestas en su programa de Gobierno.

Ahora, abogó por “una etapa de madurez política. La gente llegó a un nivel de hartazgo de que los políticos no nos pongamos de acuerdo”.

Narcotráfico y homicidios

Martinelli alertó a tener “cuidado” de no creer que “todo el problema de los homicidios está vinculado al narcotráfico”. “Hay un aumento de la violencia en el mundo vinculado a resolver los conflictos de una forma más violenta de lo que lo hacíamos antes”.

En ese sentido, dijo que hay que trabajar en salud mental, adicciones, alcoholismo y convivencia entre vecinos. No obstante, también “hay que seguir de cerca al narco”, como se ha hecho durante este quinquenio. “Tenemos récord de bocas tapiadas, allanamientos, incautaciones, hemos trabajado en blindar las fronteras, pero hay que dar lucha también a nivel internacional”.

Finalmente, se refirió a la violencia en la sociedad. “Todavía el sicariato no ha permeado” a los niveles que en otros países de América Latina. “Tampoco hay presencia de grandes organizaciones criminales que operan en Brasil y otros países”.

“En Uruguay tenemos grupos criminales desorganizados”, destacó.

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