21 de agosto de 2019 - 00:00 Jander Furcal llegó al uruguay en el año 2017 de República Dominicana y en julio de 2018 pudo traer a su esposa. Hace unos días recibió una de las noticias más felices de su vida, el nacimiento de su hija Zaira. Pero hoy pelea junto a su familia para no se desalojados de una vivienda que alquiló por dos años a 5 mil dólares. Él asegura que fueron estafados.
Jander no es el único en el edificio ubicado en la calle Hermano Damasceno que puede ser desalojado. Frente a su apartamento vive una familia cubana que llegó al Urguay hace ocho meses
Como ellos, hay una veintena de inmigrantes que están en la misma situacioón. El abogado Juan Ceretta y su equipo del Consultorio Jurídico de la Facultad de Derecho consiguieron un prórroga en el desalojo, pero la situación no es sencilla. Por ello, piden ayuda para encontrar una solución.