29 de noviembre de 2018 - 00:00 El economista Alberto Ramiro Graña asumió este miércoles la presidencia del Banco Central del Uruguay (BCU), tras la renuncia de Mario Bergara, quien dejó el cargo el pasado octubre para ser precandidato por el Frente Amplio (FA) a las elecciones de 2019.
El acto de toma de posesión contó con la presencia del ministro de Economía y Finanza, Danilo Astori, quien alabó la gestión de Bergara, al frente de la institución por casi diez años.
En ese sentido, distinguió dos aportes fundamentales logrados por el presidente saliente durante dicho tiempo: el impulso a la promoción de la educación y la cultura en materia económica y financiera y su atención a las llamadas nuevas plataformas, conocidas como FinTech (Tecnología Financiera).
Por su parte, Graña afirmó que la futura línea de actuación del banco en materia tecnológica será "prudente" y apuntó que "ni todo lo nuevo, ni lo lindo, ni lo 'high' (alto) técnico desde el punto de vista del uso de la tecnología es necesariamente bueno".
"Se trata de administrar el conflicto entre la ganancia para el sistema financiero del surgimiento de nuevas tecnologías con los riesgos" que implican, indicó.
Según Graña, "si lo disruptivo desde el punto de vista de la estabilidad del sistema financiero genera riesgos que ponen en cuestión aspectos fundamentales como, por ejemplo, la protección al usuario, se mirará con lupa más grande".
El recién nombrado presidente, que manifestó su preocupación por la guerra comercial de consecuencias mundiales que enfrentan Estados Unidos y China, también repasó la situación económica en la región suramericana, como la "crisis cambiaria en Argentina " y "altos niveles de volatilidad e incertidumbre en Brasil".
En esta línea, aseguró que Uruguay no tolerará "saltos bruscos del tipo de cambio ni caídas bruscas que no estén de acuerdo con la evolución del resto de monedas a nivel global y con los fundamentos macroeconómicos".
El nuevo directivo reiteró que llevará a cabo una "política monetaria contractiva" y se refirió a la promoción en el país del billete electrónico como una de sus iniciativas centrales para el 2019.
Bergara, en tanto, que renunció en octubre al cargo para dedicarse a su campaña política, se mostró orgulloso de su labor, fruto de un "trabajo colectivo", que ha llevado, a su juicio, a que el emisor uruguayo "tenga hoy niveles de reputación en la sociedad realmente elevados", así como "muy buena credibilidad a nivel internacional", opinó.
EFE