Alcohol y amenazas: le disparó a corta distancia y la mató

EL CASO. La víctima y su homicida llevaban juntos desde hacía cinco años, pero comenzaron a convivir hace dos. La pareja no tenía hijos en común, aunque el hijo y el nieto de la mujer vivían en casas contiguas.

En el dictamen fiscal se explica que el agresor bebía alcohol habitualmente, y ello generaba discusiones con la mujer, a quien la amenazaba con un arma de fuego y le decía que "mataría a todos".

Ante las reiteradas amenazas, "la víctima cada vez que este volvía del bar se encerraba con él en el domicilio".

"Los problemas entre ambos se sucedían de lunes a jueves, días en los que el hijode ella se encontraba fuera de su domicilio por cuestiones laborales", explicó la fiscal en el documento de formalización.

Finalmente, el día del crimen, el hombre regresó del bar a las 17:00 horas y la mujer se encerró con él en la casa. En ese momento, el agresor la agrede y rompe varios objetos.

Cuando ella se sentó en el sillón, el agresor agarró su arma, se acercó a su pareja y le efectuó dos disparos que le provocaron la muerte inmediata. El disparo que le realizó entre las cejas fue a boca tocante, es decir, en contacto con la piel, y el otro, en el maxilar, a una distancia de menos de cinco centímetros.

Minutos después, el hombre llamó a un vecino y le pidió que le avisara a la nuera de la mujer, quien finalmente llamó al 911. Al arribo de personal policial, el hombre confesó el crimen y entregó el arma.