24 de febrero de 2017 - 00:00 El exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) y exvicepresidente del Gobierno español Rodrigo Rato ha sido condenado hoy a cuatro años y seis meses de cárcel por usar tarjetas opacas al fisco durante su mandato como presidente de Caja Madrid, con lo que se apropió del patrimonio de la entidad.
La Audiencia Nacional española, donde se juzgó el caso, también condenó a su antecesor en el cargo, Miguel Blesa, a seis años por los mismos motivos. Ambos han sido condenados por un delito continuado de apropiación indebida.
Entre 1999 y 2012 ambos condenados, junto a otros 63 directivos de Caja Madrid gastaron con estas tarjetas en torno a doce millones de euros en actividades personales, según se acreditó en el juicio, aunque existen unas hojas de cálculo que registraron 15,5 millones de euros en gastos.
Entre los gastos realizados en total destacan tres millones de euros en restaurantes, dos millones en disposiciones de efectivo, más de millón y medio en desplazamientos y viajes, más de un millón en grandes almacenes, cerca de 800.000 euros en hoteles y unos 700.000 en ropa y complementos.
Este caso, que se destapó en 2014, provocó un gran escándalo en la sociedad española, después de haber pasado duros años de crisis económica con recortes laborales y sociales, y cuando se acababa de realizar el rescate a la banca con fondos públicos.
En la sentencia de este jueves se recoge que Caja Madrid contaba con estas tarjetas para complementar dietas con un límite de dinero, pero cuando Blesa llegó a la presidencia se "propició" que los directivos que disponían de ellas no justificaran el gasto, lo que demuestra, según el tribunal, un "uso particular" contra el patrimonio de la caja.
Sobre el régimen fiscal de estas tarjetas, la sentencia considera acreditado que el dinero del que disponían los usuarios no se incluía en las relaciones contractuales ni figuraba en el certificado de haberes facilitado por Caja Madrid cada año.
Entre los usuarios de estas tarjetas estaban representantes de los principales partidos españoles (el conservador PP y los socialistas del PSOE), así como sindicalistas y dirigentes empresariales, que estaban en los órganos de dirección de la caja, una entidad pública.
El tribunal considera que tanto Rato como Blesa podrían haber suprimido esta práctica y no lo hicieron, por lo que tendrán que responder "de forma solidaria" a todas las cantidades de las que dispusieron los acusados, en torno a 12 millones de euros.
Además de Rato y Blesa, la sentencia considera asimismo culpables a los otros 62 usuarios de las tarjetas, entre ellos el exvicepresidente de Caja Madrid José Antonio Moral Santín (Izquierda Unida), condenado a cuatro años de prisión.
La de hoy es la primera sentencia para Rato, quien fuera todopoderoso vicepresidente y ministro de Economía de España (1996-2004) con los gobiernos de José María Aznar, y después director gerente del Fondo Monetario Internacional (2004-2007).
Rato también está siendo investigado por la justicia en otros casos, como la salida a bolsa, supuestamente fraudulenta, de Bankia cuando él era su presidente, y que causó grandes pérdidas a miles de pequeños accionistas cuando la entidad quebró al poco tiempo.
Además, la Justicia española lo investiga por una decena de posibles delitos de fraudes fiscales entre 2008 y 2014 cometidos a través de su sociedad opaca llamada "Kradonara". EFE