Steve Collins, de la agencia espacial estadounidense NASA, espera durante los "siete minutos de terror", la compleja maniobra desde que el vehículo explorador Curiosity entra en la atmósfera marciana, hasta que el artefacto, de una tonelada, se posó en el cráter Gale, en la sala de control del Laboratorio de Propulsión en Pasadena, California (EE.UU.). El vehículo explorador Curiosity está finalmente en Marte, tras un viaje de 567 millones de kilómetros, que marca el comienzo de una misión de dos años en busca de pruebas de vida en el planeta rojo. EFE
6 de agosto de 2012 - 00:00