Brueckner, sospechoso en el caso Madeleine McCann, habría confesado el secuestro

Madeleine McCann desapareció el 3 de mayo de 2007, días antes de cumplir 4 años, mientras estaba de vacaciones con su familia en Portugal. Desde entonces, han surgido numerosas teorías sobre su paradero. Ahora, las nuevas declaraciones de Codin han reavivado el interés por el caso, a 17 años de su desaparición.

En su testimonio, Codin también mencionó que Brueckner le preguntó si era posible extraer ADN de huesos enterrados, lo que ha generado sospechas sobre un posible intento de ocultar pruebas. Además, el excompañero de celda indicó que Brueckner habló de una segunda persona involucrada en el secuestro, con quien habría discutido antes de escapar: “Me confesó que había alguien con él, supuestamente su mujer”.

Laurentiu Codin relató ante el Tribunal Regional de Braunschweig que, en un momento de la conversación, Brueckner le preguntó si él también estaba encarcelado por delitos contra menores. Brueckner, de 47 años, cumple actualmente una condena de siete años por la violación de una mujer estadounidense en Praia da Luz, la misma localidad donde desapareció Madeleine.

El testimonio de Codin se presenta en el contexto de un juicio que no está relacionado directamente con el caso McCann, pero que ha despertado un nuevo debate en los tribunales alemanes.

Durante la audiencia, Codin aseguró que Brueckner le confesó haber secuestrado a una niña en una "zona de hoteles donde vive gente rica", al detallar que "había una ventana abierta" y que intentó entrar en busca de dinero. Sin embargo, encontró a la niña y se la llevó.

Brueckner ha negado repetidamente su implicación en la desaparición de Madeleine y sostiene que no estaba en la zona en ese momento, afirmando que estaba a kilómetros de distancia con una mujer.

El juicio en curso está previsto para concluir en diciembre, con la sentencia a determinarse a principios del próximo año. Si Brueckner no es declarado culpable en este proceso, podría ser liberado de la cárcel, lo que añade un nuevo elemento de incertidumbre a la larga y compleja historia de la desaparición de Madeleine McCann.