Todo lo que tenés que saber sobre la nueva temporada de Bake Off

La novedad de este año es que Bake Off Uruguay se emitirá dos veces por semana: los lunes y los miércoles, lo que permitirá a los espectadores disfrutar aún más de las emociones y los desafíos de esta competencia.

Para saber un poco más, conversamos con el jefe de proyectos de Canal 4, Matías Garay.

“Esta temporada va a trabajar con nuevas temáticas que van a llevar a los pasteleros a elevar la exigencia en cada uno de los desafíos”, dijo Garay.

“En estas últimas dos temporadas evaluamos que habían recetas que eran muy difíciles pero también muy sencillas en su elaboración. En realidad lo que siempre decíamos es que las cosas que parecen fáciles o sencillas de hacer tienen una técnica ardua que puede hacer que los pasteleros cometan los errores básicos de la pastelería o de la cocina. Entonces buscamos recetas para ver cómo tienen que hacer algo tan sencillo y mostrar cuánta complejidad van a tener para realizarlo”.

“Estamos buscando en esta temporada esos trucos y técnicas que van a cambiar un poco la manera de hacer pastelería en tu casa”, comentó.

Esto quiere decir que al ver el programa el televidente va a sentir que puede hacer esa receta, y va a poder jugar comentando, lo que hace de esta temporada más divertida y cercana entre el público y los participantes.

“También consideramos después del elogio que tuvimos con BBC de que Bake Off Uruguay entró dentro de los mejores formatos de lo que es Bake Off consideramos que teníamos que seguir elevando la exigencia y la belleza que es Bake”, dijo Matías.

“Yo entiendo que Bake Off es distinto a otros realities porque es bello en su manera de presentarse, en la manera de mostrar los platos y en la manera de que trata a los participantes. Desde el jurado, edición y equipo de producción. Realmente se sienten contenidos y protegidos, donde ellos pueden demostrarnos no solamente lo que pueden llegar a ser sino también lo que viven”, sentenció.

Finalmente Matías dijo: “Lo que realmente queremos hacer en Bake Off es contar sus historias y contarlas a través de la pastelería”.

Conocé los participantes de este año:

Laura Plá

Tiene 38 años. Nació en Montevideo, pero toda su familia es de Treinta y Tres. Es diseñadora gráfica y tiene un emprendimiento de impresiones, ploteos y merchandising. Está casada con Nicolás, se conocen desde que eran niños, pero su primera cita fue hace 10 años, tomando unos en la rambla. Hace cinco años tuvieron a Romina, que fue diagnosticada de CEA (condición del espectro austista). Fusionar su pasión por la pastelería con Romi en su casa, es todo un desafío ya que hay ciertos electrodomésticos que le dan miedo, pero poco a poco los va superando y se va acostumbrando al sonido. Su pasión por la pastelería comienza desde muy chica cuando veía cocinar a su papá, que es panadero y pastelero, además de policía. Ahora se comunica con él vía telefónica, ya que hace veinte años que vive en el exterior. Laura disfruta del cine y leer fantasía, ciencia ficción, le encanta el animé. Tiene una huerta en el fondo de su casa donde cosecha hierbas aromáticas y pequeñas hortalizas que consume.

Afrika Coelho

Tiene 34 años. Nació y vive en la ciudad de Salto. De profesión: contadora. Trabaja en el equipo de gestión en Aldeas Infantiles. Este año comenzó comenzó a participar en un programa de cocina en un club de niños, en el que da talleres de forma voluntaria. Dentro de su rutina dedica un tiempo a tomar clases de teatro y de crossfit. Su marido se llama Daniel y tienen dos hijos, Ignacio de 8 años y Faustina de 6. Los cuatro son apasionados de las cabalgatas, cada vez que pueden salen a andar a caballo, y sus dos hijos compiten en pruebas de riendas. Le encantaría tener su propia cafetería. Cuando fue contactada para la 3era. temporada de Bake Off prometió que si quedaba seleccionada se iba caminando hasta la gruta del Padre Pío, 15 km de su casa, por lo que en enero caminó 30 km.

Catherine Denis

Tiene 36 años. Vive en ciudad de la costa. Es psicomotricista y trabaja en una mutualista como auxiliar de administración. Le encanta la fotografía, es su pasión. Está casada hace diez años con Andrés y tienen dos hijos: Santiago de 6 años y Mateo de 4 años. Se dedica a la pastelería desde que quedó embarazada de Santiago. La maternidad le despertó las ganas de elaborar sus propias tortas para el cumple de sus hijos. Experimentó de grande en la cocina porque a su mamá no le gustaba mucho cocinar. Cuando Santiago, su hijo mayor, cumplió un año se enfermó de púrpura fulminante y estuvo en estado muy grave, cuando se recuperó la pastelería fue su refugio. Le encanta la decoración, es muy perfeccionista, le dedica mucho tiempo.

Ciro Agenetti Meyer

Tiene 28 años y dos títulos universitarios: Ingeniero alimentario e Ingeniero químico. Actualmente se encuentra estudiando una maestría en biotecnología alimentaria y gastronomía molecular. Trabaja en el área de calidad de alimentos en LATU. Ciro vive con sus papás, ambos odontólogos de profesión. Es el menor de tres hermanos y el único apasionado por la pastelería. Ama trabajar en técnicas y elaboraciones complejas. Se considera autodidacta. Toca el piano y actualmente está aprendiendo violín con tutoriales de youtube.

Claudia Bellusci

Tiene 31 años. Es técnica en administración recibida en UTU. Nació y vive en La Paz, Canelones. Trabaja como administrativa en un estudio de arquitectos. De adolescente fue animadora en el colegio Salesianos, dónde la capacitaron para trabajar voluntariamente en una parroquia en barrio Colón, dando talleres y educando a muchos niños de contexto crítico. Está en pareja hace diez años con Diego. Hace tres años tuvo un embarazo de riesgo y tuvo que estar en reposo total durante 8 meses hasta que finalmente, luego de un trabajo de parto hermoso, nació Rafaela.Hace unos años construyó su propia casa, la llama: “la casa del pueblo”, es el lugar de reunión preferido de amigos y familiares, quiénes colaboraron en la construcción. Con Diego, comparte muchos intereses, uno de ellos la cerveza artesanal, que hace un tiempo cocinan en el fondo de su casa para consumo propio. Su pasión por la pastelería nace desde niña. Su papá es un pastelero profesional. Su sueño es también poder serlo.

Diego Ruiz

Tiene 19 años. Nació y vive en Fray Bentos. Estudia la licenciatura en tecnología informática en UTEC. Vive con su madre Janet y su padre Óscar. Tiene un hermano mayor y una sobrina. Pegado a su casa viven sus abuelos Edén y Anibal, con quién tiene un vínculo precioso. Su abuela le enseñó a cocinar cosas dulces desde niño. Sus lugares preferidos de la casa son la cocina y su cuarto, dónde tiene instalado un escritorio gamer dónde hace vivos por Twitch.

Ekaterina Germanovich

Tiene 40 años. Nació en la URSS, Ucrania. Es traductora y gestora. Está en Uruguay desde 2012, llegó por trabajo. Desarrollaba tareas de traductorado en la Embajada Rusa. Cuando Rusia le declaró la guerra a Ucrania, ella se pronunció en contra y tuvo que renunciar a su trabajo. Tiene dos hijos. El mayor de 17 años es de nacionalidad rusa, vive en nuestro país desde que tiene 7 años. Si bien los años colaboraron a que echara raíces en Uruguay, sus lazos con su país siguen siendo muy fuertes. Por el actual conflicto, se ve imposibilitado de viajar, ya que si lo hiciera sería enviado a cumplir servicio militar. Hace unos años conoció a su marido, Alain Yombi, de nacionalidad Camerunés, es ex futbolista profesional, jugó en varios equipos de nuestro país. Con Alain tienen un hijo de 2 años de nacionalidad Uruguaya. En su casa se hablan tres idiomas: español, francés y ruso. Su amor por la pastelería comenzó cuando una compañera le pidió una torta para su cumpleaños. Le gusta trabajar con ingredientes locales y frutas nativas uruguayas. Su sueño es abrir una pastelería en Montevideo.

Federico Ferreira

Tiene 38 años. Es odontólogo, ortodoncista y docente en UdelaR. Vive con su novio Pablo y Nina, su perrita. Cuando se fueron a vivir juntos, cómo Pablo es celíaco, optaron por cocinar sin gluten para que la contaminación cruzada no sea un problema. Le gusta mucho viajar y en cada ciudad que conoce va a tomar un café y compara las carrot cake de cada sitio que visita. Es el encargado de cocinar los postres para cumpleaños y reuniones de su grupo de amigos y de su trabajo. Hasta hace unos años compitió en grupos de patinaje artístico. Le gusta mucho las escapadas de fin de semana y las vacaciones en Chihuahua, su playa preferida.

Florencia Menéndez

Tiene 24 años. Es de Montevideo. Es estudiante de química y docente en la facultad de química UdelaR. En facultad trabaja en la cátedra de radioquímica. En ésta área se desarrollan diversas líneas de trabajo. Actualmente investigan sobre diferentes enfermedades e infecciones para ser tratadas con fármacos, cómo cáncer de próstata y mama, entre otras. Como docente imparte sus clases en la cátedra de química cuántica. Tiene dos hermanos, Fede de 17 años y Ricky de 30 años. Vive sola en el barrio Cordón. Le encanta la pastelería aunque no le encanta comer cosas dulces. Es la amiga que siempre lleva algo rico a la juntada con amigos.

Horacio Cantero

Tiene 39 años. Vive en Montevideo, barrio Villa García. Trabaja de forma independiente realizando diferentes repartos a comercios y tiene un emprendimiento de pizzas a la parrilla para eventos. En pandemia se quedó sin trabajo y con el dinero del despido se compró una camioneta que ahora usa para trabajar. Está casado, tiene dos hijos y los dos son futbolistas. Fue arquero de fútbol, pero cuando nació su primer hijo, dejó de jugar profesionalmente para formar una familia. Ahora con sus dos hijos más grandes, está estudiando la carrera de entrenador de fútbol profesional. Tiene un cuadro de fútbol con amigos, se llama “Martingalas United” y ha competido de forma amateur en varias partes del mundo, incluso en China, dónde terminó en el tercer puesto por tener el arco con menos goles. En su tiempo libre le gusta la pastelería y aprendió de forma autodidacta.

Mikaela Antúnez

Tiene 23 años. Es licenciada en comunicación. Es de Rivera, pero vive en Montevideo con su novio Ismael. Cuando se mudó a la capital, comenzó un perfil en redes sociales en el que recomienda lugares para salir a comer ya que en Rivera no hay tantas variedad de opciones cómo en Montevideo. Es muy familiera, viaja seguido para ver a su familia, y los domingos que esta en Montevideo almuerza con sus abuelos, incluso si ella no está, va su novio. Ama viajar, al igual que una de sus abuelas que le trae condimentos que acá no se consiguen. Quiere dedicarse ciento por ciento a la pastelería.

Jimena Vera

Tiene 31 años. Vive en Montevideo. Es arquitecta y trabaja en la Fuerza Aérea. A los 4 años comenzó a practicar ballet y lo hizo hasta que empezó a estudiar. Es su gran pasión junto a la pastelería. Ama combinar la pastelería con la creatividad de su profesión. Para ella la cocina es una demostración de amor y cariño. Hace poco tiempo que vive con su novio Nicolás, quién la acompaña en cada proyecto que Jimena emprende.

Sylvia Mendiondo

Tiene 58 años. Es Uruguaya, pero en el año 1983 se fue a vivir a Buenos Aires con su primer esposo, y allá tuvo a sus dos hijos. A mediados de los ‘90 se volvió a Uruguay con ellos y se volvió a casar con quién hoy es su actual marido. Trabajó muchos años en el hogar español haciendo laborterapia con personas mayores, fue su trabajo más gratificante. Actualmente trabaja como niñera y tiene un emprendimiento de suculentas con su hija. Sus abuelos y su mamá son egipcios. Se vinieron a vivir a Uruguay cuando la mamá tenía 10 años. Su abuelo trabajaba en el gobierno, pero cuando emigraron a nuestro país comenzó a trabajar de tornero. Le gusta mucho la pastelería. Le encanta mirar y leer recetas. Todo lo que cocina es casero y hecho en casa.

Victoria García

Tiene 26 años. Es estudiante de ciencias económicas y trabaja como administrativa en un laboratorio farmacéutico. Es fanática de Fénix. Todos los domingos va con su padre a la cancha. No faltan nunca. Se presentó 3 veces a Bake Off. Su abuelo la alentó a hacerlo por primera vez en la primera temporada. El año pasado falleció y ésta oportunidad de haber entrado a la carpa más dulce, es un homenaje a él. Comenzó a interesarse por la pastelería cuando hizo cupcakes personalizados para compañeros de trabajo, previo a la pandemia. Ellos la incentivaron a seguir y ahora no puede parar de cocinar.