30 de octubre de 2018 - 00:00 Juan Fígoli, o "Juancito" como lo decían sus familiares y amigos, nunca dejó de confiar en la gente, pese a que tuvo que enfrentar a la delincuencia en varios momentos durante sus días en Montevideo, lejos de su San Carlos natal, donde vivían sus padres y su hermana.
El joven, de 25 años y estudiante de sexto de Medicina, era "muy empático", sincero, sociable y con una enorme preocupación por quienes lo rodeaban, según contó a Telenoche, uno de sus mejores amigos, Gastón.
"Nos conocemos desde que teníamos cinco años, hicimos juntos el jardín, la escuela, el liceo y las clases de inglés", recordó.
A Juan le gustaba vivir en la capital, solía confiar en la gente y le gustaba andar a pie, sin importar el barrio o la calle. "Aunque le robaron varias veces, siempre le dio oportunidades a los delincuentes".
Además, indicó que siempre estuvo vinculado a causas sociales, y por ello recaudaba juguetes y le llevaba comida a sus vecinos de Cordón. "Tenía un corazón muy grande y la bondad se le veía de lejos".
Gastón explicó, además, que hace unos meses había dejado escrito que en caso de muerte, donaba su cuerpo a la Facultad de Medicina, donde mañana el decano hará un homenaje en su nombre.