16 de febrero de 2017 - 00:00 En Rusia, el presidente Tabaré Vázquez se refirió a la delicada situación que atraviesa la empresa Fanapel, ubicada en la localidad de Jaun Lacaze. En conferencia de prensa, el mandatario dijo que, a pesar de los esfuerzos del gobierno, no ve la reapertura de la empresa como algo factible.
"Lamentablemente no abrigo esperanzas de que el problema de Fanapel se pueda superar", indicó Vázquez.
En ese sentido, el mandatario dijo que ahora el foco del gobierno está puesto en cómo mitigar los efectos que el cierre de la empresa pueda tener en Juan Lacaze.
"Hay que empezar a pensar más allá de Fanapel, comenzar a pensar en Juan Lacaze, porque va a tener un impacto negativo muy importante. Esta es la realidad de este momento", sostuvo.
Esto refiere a la comisión interministerial destinada a atender esta situación, anunciada el pasado martes por el ministro de Trabajo, Ernesto Murro en Telenoche.
La comisión estará dirigida por el ministerio de Economía y estará integrada también por los ministerios de trabajo e industria, junto a Inefop, la Oficina de Planeamiento y Presupuesto y organizaciones locales, según explicó el titular de trabajo.
SITUACIÓN DELICADA. La fábrica de pepel emplea a cerca de 250 personas de la localidad y desde Diciembre se encuentra inactiva.
A pesar de los esfuerzos de gobierno para que la empresa retome las actividades, los titulares de la fábrica indicaron que ninguno de los beneficios tributarios y alternativas ofrecidas por el gobierno ayudará a que la fábrica sea rentable.
Días atrás, el gerente de producción de la fábrica dijo a un puñado de funcionarios que se desempeñan en la planta que el cierre de Fanapel era una decisión tomada. Si bien supone un anuncio extraoficial, la empresa envió una circular a los trabajadores exhortando a que se presenten de manera individual para llegar a acuerdos por crédito de trabajo; la etapa previa a efectuar despidos.