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Competencia

Bake Off Uruguay, el gran pastelero: combinaciones de sabores y muchos detalles

Los participantes de Bake Off Uruguay se enfrentaron a dos desafíos difíciles, pero inspiradores, que tuvieron resultados y devoluciones para todos los gustos.

12 de mayo de 2022 - 09:07

La competencia más dulce de la televisión uruguaya empieza a ser cada vez más exigente y este miércoles, en una nueva noche gala, el reality tuvo una entrega emocionante.

Los participantes de Bake Off Uruguay, el gran pastelero, se enfrentaron a dos desafíos difíciles, pero inspiradores, que tuvieron resultados y devoluciones para todos los gustos.

A los pocos minutos de ingresar a la carpa, Mathías, el pastelero estrella de esta semana, tuvo que elegir en cuál desafío utilizará el beneficio de los cinco minutos extra y, al igual que los anteriores portadores del delantal violeta, escogió el desafío técnico.

Detalles, sabor y precisión: un desafío técnico con errores y aciertos

La noche se abrió de la mano del desafío técnico, que consistió en que los pasteleros elaboraran tres tartas con cremoso de toffee salado y praliné de avellanas en 60 minutos. Para los participantes esta preparación fue una gran sorpresa que generó, simultáneamente, incertidumbre y entusiasmo. Antes de comenzar, como en cada reto, el jurado dio sus indicaciones para lograr buenos resultados.

Luego, y tras tomar los apuntes necesarios, los pasteleros empezaron a trabajar en sus preparaciones. Mathías fue el primero porque utilizó sus cinco minutos extra y los demás pasteleros lo siguieron cuando se dio comienzo al desafío. Entre charlas con Jimena, explicaciones técnicas y algunos errores, todos fueron avanzando en un reto complejo que requirió mucha precisión.

Los detalles fueron un punto clave: la temperatura del caramelo, el praliné cortado de forma triangular y la prolijidad de la presentación generaron complicaciones y muchos participantes se sintieron nerviosos. Cuando restaban solo dos minutos, eran muchos los que sentían que no tendrían sus preparaciones prontas a tiempo.

A pesar de que durante la cuenta regresiva realizada por Jimena los pasteleros lo dieron todo para llegar a tiempo y lograron terminar, en muchos casos los resultados no fueron los esperados: “No es para aplaudir”, dijo Camila sobre sus tartas.

Las devoluciones fueron variadas: hubo buenas presentaciones, algunas confusiones y varias correcciones. Los expertos degustaron cada una de las tartas y pusieron sus miradas en el praliné y en el sabor del toffee salado: dos puntos clave de este desafío.

Después de debatir, el jurado resolvió que el primer lugar del desafío técnico fuera para Noelia, que, si bien se mostró contenta, también reconoció que todavía tiene detalles para ajustar en el concurso: “Soy consciente de que la preparación no es perfecta y tengo mucho para mejorar”, dijo.

Tras un primer reto tan difícil como delicioso, los participantes avanzaron hacia el desafío creativo de la noche, que consistió en preparar un pot pie dulce o salado con una guarnición: un pastel de origen anglosajón, que fue adoptado por los norteamericanos. Durante las recomendaciones, Hugo Soca contó que este es uno de sus platos preferidos, lo que generó nerviosismo en la carpa.

Un buen desafío creativo y una despedida cargada de emociones

Una vez finalizados los 90 minutos, todos los pasteleros dieron un paso al frente con sus preparaciones prontas y alegres con los resultados obtenidos. La variedad de sabores, las combinaciones elegidas y las distintas propuestas fueron los puntos resaltados por los expertos.

Después de un comienzo complejo y con algunos tropiezos en el primer reto, el jurado encontró mejores resultados en las preparaciones del desafío creativo. Si bien hubo errores y puntos a mejorar, los expertos consideraron que el rendimiento de los participantes había mejorado sustancialmente.

Una pastelera estrella feliz y una despedida a pura emoción

Después de una deliberación con mucho diálogo y con un reconocimiento al avance de los pasteleros, el jurado volvió a la carpa a comunicar quién se llevaría el delantal violeta. Este miércoles, el delantal violeta fue para Sofía, que deleitó al jurado con una gran presentación en el desafío creativo.

Después de los aplausos para la nueva pastelera estrella, el reconocimiento del jurado a su trabajo y las felicitaciones de sus compañeros, llegó el momento más difícil de la noche: conocer quién abandonaría la carpa más famosa de la televisión. Esta vez, le tocó el turno a Paula, la pastelera más joven del concurso.

En su despedida, la participante se mostró agradecida y contenta con la experiencia: “Entré al concurso pensando si pasaría el primer programa, así que esto es un montón”, dijo. Además, Paula reconoció especialmente a una persona que la inspiró mucho: su vecina Norma, una pastelera que la ayudó desde el principio del reality.

Una noche de sorpresas y alegría

Este miércoles, el jurado, integrado por Hugo Soca, Sofía Muñoz y Rose Galfione, fue exigente, pero se mostró sorprendido con el desempeño de los participantes, especialmente en el desafío creativo, que dio como resultado grandes preparaciones. Jimena, por su parte, acompañó a los pasteleros durante todo el programa.

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